A causa de las guerras de independencia y de la pobreza consecuente a ellas, los países latinoamericanos, con una economía basada en la explotación rudimentaria de la tierra, en la que apenas se comenzaba a comprar máquinas, enfrentaban entonces con mucho atraso las consecuencias de la Revolución Industrial que se había iniciado hacía medio siglo en Inglaterra. El libre comercio entre estos países y Europa se limitó al intercambio de metales preciosos y productos agrícolas. Por lo anterior se puede deducir que la Revolución Industrial influyó en América Latina, porque