La princesa Ambar En un lejano país habitaba una hermosa princesa de dorado Cabello y ojos color miel, su nombre era Ámbar. Ambar vivía en un bello castillo con su padre y su adorable madrastra, pues su madre había fallecido al dar a luz. Una tarde, en la que la familia real paseaba por el bosque encontraron una niña enferma y hambrienta llamada Obsidiana. Los padres de Ambar la llevaron al castillo y la auxiliaron. Desde ese día, Obsidiana, una hermosa joven de negro y largo cabello, vivía en el castillo colaborando con los oficios, pero recibiendo siempre el Cariño y los cuidados de los padres de Ámbar. Sin embargo, no todo era color de rosa, Ambar era una joven egoísta y envidiosa que quería todo para kella y detestaba a Obsidiana por todo el amor que sus padres le brindaban. Ambar había intentado de todo, hacerla perder en el bosque durante los paseos reales y hasta intentar engañar a sus padres mostrándola como una enemiga del reino. A pesar de todos los engaños y artimañas Ambar no lograba su cometido, pues Lylu el hada protectora de Obsidiana siempre lograba salvarla de todas sus trampas. Una mañana, estando la familia real en uno de sus paseos por el bosque, Obsidiana y Ambar se encontraron con dos hombres jóvenes y muy apuestos desmayados en el suelo junto a sus corceles. Obsidiana y Ámbar les ayudaron a recobrarse y uno de ellos al despertar quedó prendado de la belleza de Obsidiana. El hombre les contó que era un príncipe de occidente y que unos ladrones habían intentado robarlos y dándolos por muertos los habían dejado abandonados. Ambar, nuevamente se llenó de envidia al ver como el príncipe se fijaba en Obsidiana y no en ella. Los reyes invitaron a los hombres a pasar unos días en su castillo mientras se recobraban del todo, invitación a que el príncipe aceptó. El segundo hombre aún mal herido, estuvo enfermo por varios días recibiendo los cuidados de la familia treal. El apuesto joven se había enamorado de Ambar durante su convalecencia, sin que ella, cegada por Ja envidia, pusiera cuidado a sus sentimientos. Ambar, en su afán de quitarle su amor a Obsidiana intentó enamorar al príncipe, sin obtener resultado. Obsidiana y Lylu, viendo el amor que sentía el otro joven por Ámbar decidieron ayudarle a renamorarla y sabiendo que ella querría quitarle a Obsidiana todo lo que tuviera, se dedicaron a cuidarlo hasta que se recuperó. Ámbar enfurecida por los cuidados de Obsidiana al joven, le reclamó y la alejó de él, aceptando su amor. En cuanto al segundo joven se recuperó del todo, los jóvenes informaron a la familia real y a Obsidiana que eran hermanos, ambos príncipes de occidente. Ambar entendió que no debía sentir envidia de Obsidiana ni de nadie pues su belleza y su fortuna eran tan grandes como las de cualquier otra, abrazó a Obsidiana y las dos parejas se casaron y vivieron felices por Piempre. Fin los pronombres comunes propios