contestada

¿Seremos libres? ¿Seremos esclavos? Problema terrible, de cuya solución depende por ahora la suerte de tantos millares de hombres, y para lo futuro la felicidad o la miseria de sus innumerables descendientes. ¡Despertad, hermanos míos, pobres americanos! Jamás la región que habitáis fue cubierta de nubes más densas ni más melancólicas. Fuente: Henríquez, C. Ejemplo Memorable. Aurora de Chile, (1812).