En 2017, la empresa Cloudfare retiró de internet un sitio web neonazi tras una violenta concentración de extrema derecha en Virginia. Había fuertes justificaciones para tal medida. Sin embargo, los ejecutivos de Cloudflare habían defendido anteriormente el alojamiento de una serie de foros desagradables con el argumento de la libertad de expresión. Tras el incidente de Charlottesville, el director general comentó: “Literalmente, me desperté de mal humor y decidí que no se debería permitir a alguien así en internet”. “Puede que haya sido frívolo, pero esta declaración y otras acciones de las empresas de redes sociales muestran la falta de marcos claramente definidos en torno a la moderación de la expresión online”, señalan desde Fidelity International.

¿Me alegraría que esta decisión encabezara las noticias mañana?
¿Existe un aspecto ético no negociable en juego?
¿Mi decisión hará del mundo un lugar mejor?
¿Qué pasaría si todos hicieran esto?
¿Cómo afectará esto a mi identidad o la de mi organización?
¿Es esto consistente con mis valores y principios?​