El Fondo Monetario Internacional (FMI) enfatizó que en América Latina se evidencian altas tasas de participación laboral y resaltó la necesidad de una mayor innovación tecnológica como principal reto para el desarrollo económico. En respuesta a estas afirmaciones, una analista económica sostuvo que “el verdadero problema en esta región es que el 50 % de las mujeres en edad de trabajar, en promedio más educadas que los hombres, se dedican a la economía del cuidado, es decir, a la atención del hogar, sin ningún tipo de salario o reconocimiento económico ni social”. En relación con lo anterior, se podría afirmar que el argumento de la analista económica es válido para:

a.
respaldar el concepto del FMI, pues ella muestra que se subutiliza el potencial que las mujeres tienen para hacer de la región un área más tecnificada.

b.
refutar el análisis del FMI, pues ella demuestra que la desigualdad de género es el principal obstáculo para el desarrollo económico y no la falta de tecnología.

c.
rechazar el diagnóstico de FMI, pues demuestra que para el caso de América Latina la innovación tecnológica no tiene ningún efecto en el desarrollo económico.

d.
apoyar la explicación de FMI, pues ambos muestran que la población femenina de América Latina ha aumentado su participación en el mercado laboral.