Los mares y los océanos brindan a los seres humanos muchos beneficios: favorecen el comercio y la navegación, son fuente de alimento para millones de personas y contienen diversos recursos naturales, como minerales, metales y gases. Sin embargo, han despertado el temor de los seres humanos por su enorme energía y el misterio de sus zonas profundas. El poder de los mares sobrepasa la imaginación humana y provoca miedo su fuerza, que se manifiesta en oleajes y tsunamis.