Las hojas de las plantas se calientan con el sol por encima de la temperatura del aire, favoreciendo la pérdida de agua a través de los estomas. A diferencia de los animales, las plantas no pueden buscar un lugar sombreado para evitar la pérdida de agua. De las siguientes estrategias, aquella que resuelve el problema planteado con mayor eficiencia para las funciones vitales de la planta es: