esa tarde ella me contó su historia con pelos y señales Entonces me di cuenta de que confiaba en mí que aquello no se lo contaría a cualquiera en las últimas semanas me había ganado su amor pero no fui consciente de ello hasta aquel momento yo ya sabía desde la primera vez que cruzamos la mirada que entre nosotros surgía algo especial que lo nuestro sería intenso una de esas relaciones que se te hacen un huequito en el alma para siempre de las que no se olvidan a las dos semanas de de volver a la rutina tras las vacaciones de verano Dónde se encuentran los pronombres de este texto​