En los simuladores de física se tienen errores porque no se consideran todos los parámetros asociados a la realidad o porque se introducen parámetros de manera incorrecta.
Por ejemplo, muchos simuladores al comprobar la segunda ley de Newton no consideran fenómenos para la fricción, sino que consideran un sistema ideal.
Esto puede provocar errores o disminuir la certeza de la verificación. Entonces, debemos considerar que las simulaciones son aproximaciones a comportamientos reales debido a la presencia de errores.
