Respuesta :

Respuesta:

 las consecuencias de la contaminación ambiental ya forman parte del discurso político. En regiones como la Unión Europea, de hecho, se han marcado una serie de directrices que los países miembros deberán cumplir si no quieren ser multados. Este tipo de decisiones políticas se podrían catalogar como “directas”, puesto que están enfocadas directamente a atajar este problema de gran magnitud.

Por ejemplo, nuevas leyes sobre las fuentes de energía o el transporte afectan a toda la población (tanto en el día a día como en los impuestos y el gasto del Estado) y su propósito no es otro que reducir la emisión de gases contaminantes.

Sin embargo, las naciones también se ven abocadas a tomar otro tipo de decisiones que sin que nos lo planteemos tienen como causa el cambio climático.

Explicación:

en síntesis, los gobiernos deben darle conciencia a los ciudadanos sobre el cuidado del medio ambiente