Respuesta :

Instar a las adolescentes a no tener relaciones sexuales. Instarlas a usar métodos eficaces de anticoncepción para prevenir el embarazo, y además usar condones para protegerse contra enfermedades de transmisión sexual.

Respuesta:

Search

A-Z Index

Skip directly to site contentSkip directly to page optionsSkip directly to A-Z link

Signos Vitales

Este sitio web está archivado con fines históricos y ya no se le hace mantenimiento ni actualizaciones.

Un rol clave para los proveedores de atención médica

Inglés (English)

Abril 2015

Icono de una niña adolescente

43 %

Cerca de 43 % de las adolescentes de 15 a 19 años ha tenido relaciones sexuales en algún momento.

4 de cada 5

4 de cada 5

Más de 4 de cada 5 (86 %) usaron anticonceptivos la última vez que tuvieron relaciones sexuales.

Icono de un gráfico representando el 5%

5 %

Menos de 5 % de las adolescentes que usan anticonceptivos usan los tipos más eficaces.

Tener bebés en la adolescencia puede implicar costos de salud, así como económicos y sociales para las madres y sus hijos. En los Estados Unidos ha descendido la tasa de nacimientos en adolescentes, sin embargo, en el 2013 nacieron más de 273 000 bebés de madres adolescentes de 15 a 19 años. La buena noticia es que una mayor cantidad de adolescentes está esperando antes de tener relaciones sexuales, y entre aquellas que son sexualmente activas, cerca del 90 % usó anticonceptivos la última vez que tuvo relaciones sexuales. Sin embargo, las adolescentes usan con más frecuencia condones y píldoras anticonceptivas, que cuando no se usan de manera sistemática y correcta, son menos eficaces para prevenir embarazos. Los dispositivos intrauterinos (DIU) y los implantes, que se conocen como anticonceptivos reversibles de larga duración (LARC, por sus siglas en inglés), son los tipos de anticonceptivos más eficaces en adolescentes. El uso de los LARC es seguro, no requiere que se tome una píldora cada día ni que se haga algo

Explicación:

Algunos se preguntan qué tiene que ver el embarazo adolescente con el desarrollo. Lo cierto es que no solo es un problema de salud pública, sino que también amplía las brechas sociales y de género, ya que está asociado con altos niveles de mortalidad durante el embarazo, parto y puerperio, y representa la sexta causa de deserción escolar, afectando así, las oportunidades laborales y los niveles de ingresos de las y los adolescentes. Para América Latina esto representa un reto importante, ya que la región se ha convertido en el segundo subcontinente con la tasa de embarazo adolescente más alta.

Otras preguntas