Respuesta :

Respuesta:

no cuesta comunicarse con Dios si no que nosotros no oramos bien o hemos echo un pecado que no nos arrepentimos ante el

Respuesta:

La

Explicación:

oración es el oxígeno de nuestra vida cristiana: nos permite respirar, estar sanos, aliviar nuestras dolencias, seguir caminando y sobre todo acrecentar nuestra relación con Dios. La oración pasa por momentos de aridez y de grandes frutos, este ritmo es parte de nuestra vida espiritual. Es normal que pases por momentos de gran gozo y consolación interior, y otros donde parece todo oscuro y desolado. ¡No te desanimes nunca al orar! Hay que orar con perseverancia.

ARELIS