Respuesta :
En el siglo XXI, el cliente más frecuente y destacado es el cliente digital o cliente conectado. Este término se refiere a las personas que utilizan activamente Internet y las tecnologías digitales en su vida diaria para realizar compras, interactuar con empresas, acceder a servicios y consumir contenido.
Hay varias razones por las cuales el cliente digital se ha vuelto tan destacado en el siglo XXI:
Acceso generalizado a Internet: Con la expansión de la conectividad a Internet en todo el mundo, cada vez más personas tienen acceso a la red y pueden aprovechar sus beneficios.
Desarrollo de dispositivos móviles: La proliferación de teléfonos inteligentes y otros dispositivos móviles ha permitido que las personas accedan a Internet en cualquier momento y lugar, lo que ha aumentado la conveniencia y la accesibilidad de los servicios en línea.
Cambio en los hábitos de consumo: Los consumidores modernos están cada vez más acostumbrados a realizar transacciones y realizar actividades en línea. La comodidad, la variedad de opciones y la capacidad de comparar precios fácilmente son factores que han contribuido a este cambio en los hábitos de consumo.
Personalización y experiencia del cliente: Las empresas han reconocido la importancia de brindar experiencias personalizadas y adaptadas a las necesidades individuales de los clientes. Las tecnologías digitales permiten recopilar datos sobre el comportamiento y las preferencias de los clientes, lo que facilita la personalización de productos y servicios.
Interacción en redes sociales y plataformas digitales: Las redes sociales y otras plataformas digitales han transformado la forma en que las empresas se relacionan con sus clientes. Las interacciones en línea brindan oportunidades para el compromiso, la retroalimentación y la construcción de relaciones sólidas entre las marcas y sus clientes.
En resumen, el cliente digital se ha convertido en el cliente más frecuente en el siglo XXI debido a la omnipresencia de Internet, el desarrollo de dispositivos móviles, el cambio en los hábitos de consumo, la personalización de la experiencia del cliente y la interacción en online a través de redes sociales y otras plataformas digitales.