La historia del Minotauro es una antigua leyenda de la mitología griega. Según el mito, el Minotauro era una criatura con cuerpo de hombre y cabeza de toro, que habitaba en un laberinto construido por el rey Minos en Creta.
El origen del Minotauro se remonta a una afrenta cometida por el rey Minos contra Poseidón, el dios del mar. Para castigarlo, Poseidón hizo que la esposa de Minos, Pasífae, se enamorara de un toro blanco que había sido enviado como sacrificio al dios. De su unión nació el Minotauro, una criatura monstruosa.
Minos, avergonzado por la existencia del Minotauro, ordenó construir un laberinto imposible de escapar en el palacio de Cnosos, donde encerró a la criatura. Además, Minos exigió un tributo anual de Atenas: siete jóvenes y siete doncellas, que eran arrojados al laberinto para ser devorados por el Minotauro.
La leyenda cobra vida cuando Teseo, un héroe ateniense, decide enfrentarse al Minotauro y liberar a su ciudad del terrible tributo. Con la ayuda de Ariadna, hija de Minos, Teseo logra ingresar al laberinto y enfrentar al monstruo. Gracias a un ovillo de hilo que Ariadna le proporciona, Teseo es capaz de encontrar su camino de regreso después de matar al Minotauro.
La historia del Minotauro es emblemática en la mitología griega, representando la lucha entre el bien y el mal, así como la valentía y la astucia de los héroes que desafían los desafíos imposibles.
