Respuesta :

En resumen, la tierra orgánica es una mezcla rica y equilibrada de materia orgánica, minerales, microorganismos, aire y agua, que proporciona un ambiente óptimo para el crecimiento de las plantas. Su composición puede variar, pero su principal característica es la presencia de materia orgánica en descomposición, que es esencial para la fertilidad y la salud del suelo.