No está bien decirle eso a una niña de 9 años, ya que puede ser ofensivo y traumático para ella. Como adultos, es importante tener cuidado al hacer comentarios como estos, especialmente cuando se relacionan con la vida privada de los demás. En lugar de decir cosas que puedan herir o avergonzar a alguien, es mejor tratar de encontrar formas de ayudar y apoyar de manera positiva.