La variedad de especies en una zona se debe a la diversidad de factores como el clima, el suelo, la disponibilidad de recursos, la interacción entre las especies y la historia evolutiva de la región.
En general, la diversidad de una zona se relaciona con la cantidad de recursos disponibles y la complejidad del hábitat. Uno de los factores más importantes que determinan la diversidad de una zona es la temperatura y el clima. Las zonas cálidas y húmedas suelen ser más biodiversas que las zonas frías y secas.
