Respuesta:
Los aztecas tenían un profundo interés en el estudio del universo y desarrollaron un sistema complejo de observación astronómica. Utilizaban observatorios, como el Templo Mayor en la ciudad de Tenochtitlán, para estudiar los movimientos de los cuerpos celestes.
Los aztecas dividían el año en 18 meses de 20 días cada uno, lo que sumaba un total de 360 días, a los que añadían 5 días adicionales como un periodo considerado como "nefasto". Estos 18 meses estaban asociados con ciertos dioses y eventos agrícolas.
Además, tenían un calendario solar de 365 días que se basaba en las observaciones astronómicas. Este calendario estaba relacionado con festivales religiosos y ciclos agrícolas.
También tenían conocimientos avanzados sobre la posición de las estrellas y planetas, lo que les permitía predecir eclipses solares y lunares. Estos conocimientos astronómicos eran fundamentales para su vida cotidiana, sus prácticas religiosas y sus actividades agrícolas.
En resumen, los aztecas estudiaban el universo a través de la observación astronómica, la creación de calendarios precisos y su integración en su cosmovisión y prácticas culturales.
