Respuesta :

Respuesta:

Básicamente por dos motivos.

Japón literalmente salió de un régimen medieval hace apenas 150 años mas o menos.

Puede parecer difícil de creer, pero hace 200 años existía un shogunato con samurais, castas y resto de parafernalia. Obviamente no estaban tecnológicamente en el medievo, pero poco faltaba.

El segundo motivo es que la política japonesa está fuertemente influida por la tradición y sobre todo por los Zaibatsu primero, y los Keiretsu después.

Estos son literalmente grupos de empresas con objetivos comunes. No necesariamente empresas del mismo grupo o propietarios, simplemente basta con que sus objetivos sean los mismos. Se dice que los Zaibatsu fueron en buena medida responsables del militarismo imperial anterior a la segunda guerra mundial en su afán por conseguir materias primas para sus industrias.

Aquí están las razones:

1. Gasto interno y estímulos del gobierno: Japón ha impulsado el gasto interno durante décadas para mantener su economía en marcha. Sus ciudadanos y empresas son reacios a consumir, lo que requiere que el estado gaste por ellos. Esto ha llevado a una deuda pública significativa.

2. Demografía: La población japonesa es longeva, lo que aumenta los costos de la seguridad social y la atención médica. Los jubilados prefieren ahorrar, lo que contribuye a la situación de deuda.

3. Eventos históricos: La deuda pública de Japón se disparó tras la burbuja financiera e inmobiliaria de la década de 1990. Eventos como la Gran Recesión de 2008, el terremoto y tsunami de Fukushima en 2011, y la pandemia de Covid de 2020-2021 amplificaron la deuda.

En resumen, Japón es un país con una economía endeudada, pero su estabilidad y confianza en los mercados internacionales siguen siendo notables