Respuesta :

Aquí un resumen acerca del comentario de los textos bíblicos de Jeremías 1,5-10:

Dios nunca hizo a nadie que puede llenar el sitio que tú llenas y hacer las cosas que tú puedes hacer. Ésta es la maravilla de la forma en la que Dios forma la vida humana: que de los billones y billones que han nacido en esta tierra no hay duplicados. Cada uno es único, preparado por Dios para el tiempo en el que ha de vivir. Ésta es la palabra que vino a Jeremías, para fortalecerle. “Mira”, Dios dijo, “te he preparado para esta misma hora”, como nos has preparado a ti y a mí para este tiempo, para este mundo, para esta hora de la historia humana.

Oí esta semana una historia acerca de la muerte de un hombre joven, un pastor. Cuando se estaba muriendo de cáncer, su padre y su tío, que son gemelos, le vinieron a ver. Después de haber estado visitando con ellos durante un ratito, le preguntó a su tío: “¿Te importaría si hablo a solas con mi padre?”. Su tío contentamente esperó en el pasillo. Cuando su padre salió, le dijo a su hermano: “Quiero decirte lo que hizo David mientras estábamos solos. Me llamó a su cama y me dijo: ‘¿Puedo poner mis brazos a tu alrededor?´. Me agaché lo más que pude y dejé que pusiera sus brazos a mi alrededor. ‘Y ahora, Papá, ¿podrías poner tus brazos a mi alrededor?´ Apenas pude controlar mis emociones, pero puse mis brazos a su alrededor. Entonces, con sus brazos a mi alrededor, me dijo: ‘Papá, quiero que sepas que el mejor regalo que Dios jamás me dio aparte de mi misma salvación, fue el regalo de un padre y una madre que aman a Dios y me enseñaron a amarle también´”.

Eso es lo que Dios le está diciendo a Jeremías: “¡Menudo regalo tienes! Cómo te he preparado para este momento, a través de generaciones que quedan tras de ti, para que puedas vivir y hablar y actuar en este tiempo en la historia”.