Respuesta :

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Raquel desempeñó un papel crucial en la vida de Atima Imaoma, como se narra en la novela El espejo africano de Liliana Bodoc. Permíteme resumir su historia:

La historia de Atima Imaoma:

Comienza en una pequeña aldea donde vivían Imaoma, un joven cazador, y Atima, una bella muchacha experta en teñir plumas y coser pieles.

Imaoma expresó su deseo de casarse con Atima, y ella aceptó. Se casaron y tuvieron una hija llamada Atima Imaoma.

Sin embargo, un día, Atima e Imaoma fueron sorprendidos por cazadores de hombres. Capturaron a la niña y Atima luchó por rescatarla, pero en vano.

Atima suplicó al jefe de los cazadores que entregara el espejo de ébano a su hija. El hombre accedió.

Atima Imaoma fue llevada en barco a América del Sur, donde fue vendida como doncella personal a la familia Fontezo y Cabrera. Le cambiaron el nombre a Silencio.

La relación con Raquel:

Raquel, la hija de la familia Fontezo y Cabrera, se convirtió en la ama de Silencio (antes Atima Imaoma).

A pesar de las circunstancias, Raquel trató bien a Silencio y la enseñó a leer y escribir en secreto.

Cuando la familia Fontezo y Cabrera enfrentó dificultades económicas, tuvieron que vender a Silencio. Raquel suplicó que no la abandonaran, pero fue en vano.

Silencio pasó sus últimos momentos en el granero, sosteniendo el pequeño espejo de ébano tallado por su madre. Al leerlo en el espejo, descubrió su verdadero nombre: Atima Imaoma.

Raquel, al reconocer la injusticia de la situación de Atima Imaoma, tomó la decisión de liberarla y proteger su vida, desafiando las normas establecidas. Su conexión a través del espejo y su compasión marcaron un impacto significativo en la vida de Atima Imaoma.