Respuesta:
Los colonizadores llegaron a Marte desde la Tierra por diversas razones. Algunos tenían miedo, otros no lo tenían. Algunos eran felices, mientras que otros estaban desdichados. Cada uno tenía una razón diferente para emprender el viaje. Dejaron atrás mujeres odiosas, trabajos desagradables o ciudades que no soportaban. Venían en busca de algo, para dejar algo o para conseguir algo. Algunos tenían sueños ridículos, otros sueños nobles, y algunos no tenían sueños en absoluto.
El gobierno promovía la migración a Marte con carteles de cuatro colores que decían: “¡Hay trabajo para usted en el cielo! ¡Visite Marte!” A pesar de que muchos se sentían enfermos antes de que el cohete dejara la Tierra, el número de emigrantes creció constantemente hasta superar a los que ya se encontraban en Marte. Sin embargo, los primeros solitarios no tuvieron consuelo. Se sintieron verdaderamente solos al ver cómo su hogar se reducía al tamaño de un puño, una nube o una cabeza de alfiler, y luego desaparecía detrás de una estela de fuego. En el vasto espacio, rodeados de hombres extraños, buscaban un mundo que era imposible imaginar
Explicación:
