Respuesta :

Respuesta:

En el Nuevo Testamento de la Biblia, particularmente en el Evangelio de Juan, Jesús ofrece consuelo a sus discípulos para prevenir y aliviar su tristeza, especialmente al hablar sobre su inminente partida (su arresto, crucifixión y ascensión). En estos momentos, utiliza varios enfoques para asegurarles que no están solos y que tienen razones para tener esperanza y alegría:

1. **Promesa del Consolador (Espíritu Santo)**: Jesús promete enviar el Espíritu Santo, también conocido como el Consolador o Paráclito, que estará con ellos para guiarlos, enseñarles y recordarles todo lo que Él les ha dicho. Este es un aspecto clave de su discurso de despedida en los capítulos 14 a 16 del Evangelio de Juan.

2. **La promesa de su retorno**: Jesús asegura a sus discípulos que regresará después de preparar un lugar para ellos en la casa de su Padre. Esta promesa de un reencuentro futuro sirve para infundir esperanza y alegría en sus corazones, a pesar de la tristeza temporal que puedan sentir por su partida.

3. **Enseñanzas sobre la paz y la alegría**: En Juan 14:27, Jesús dice: "La paz os dejo, mi paz os doy; yo no os la doy como el mundo la da. No se turbe vuestro corazón, ni tenga miedo." Con estas palabras, busca tranquilizar a sus discípulos y alentarlos a mantener la paz en sus corazones, una paz que es diferente y más perdurable que cualquier cosa que el mundo pueda ofrecer.

4. **Invitación a permanecer en su amor**: Jesús instruye a sus discípulos a permanecer en su amor y seguir sus mandamientos, lo cual les traerá completa alegría. En Juan 15:10-11, menciona que ha compartido estas cosas para que su alegría esté en ellos y su alegría sea completa.

5. **Oración por ellos**: En Juan 17, Jesús ora no solo por sus discípulos actuales, sino también por los futuros creyentes, pidiendo unidad, protección y que puedan compartir su gloria. Saber que Jesús intercede por ellos también proporciona consuelo y seguridad.

Estas acciones y enseñanzas de Jesús están diseñadas para fortalecer a sus discípulos y prepararlos para los desafíos que enfrentarán, asegurándoles que a pesar de las pruebas y la tristeza, tienen razones sólidas para mantener la esperanza y la alegría.

Respuesta:

A lo largo de Su ministerio terrenal, Jesús mostró el amor que tenía por los demás cuando bendecía y servía a los pobres, los enfermos y los afligidos. Les dijo a Sus discípulos: “Este es mi mandamiento: Que os améis unos a otros, como yo os he amado” (Juan 15:12; véase también Juan 13:34–35; Moroni 7:46–48).ón: