Respuesta :
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Explicación:
El comportamiento moderado durante la evolución del embrión y el feto puede influenciarse tanto por factores genéticos como ambientales. Los rasgos genéticos pueden predisponer a ciertos comportamientos, pero el ambiente en el que se desarrolla el individuo también puede influir en cómo se manifiestan esos rasgos.
Si los padres tienen un comportamiento moderado durante el embarazo y transmiten esos rasgos genéticos a sus hijos, existe la posibilidad de que esos hijos también muestren un comportamiento similar. Sin embargo, el ambiente en el que crecen, las experiencias que tienen y las influencias sociales también pueden desempeñar un papel importante en la formación de su comportamiento.
En resumen, mientras que ciertos rasgos pueden transmitirse de padres a hijos a través de la genética, el comportamiento también puede ser moldeado por el ambiente y las experiencias individuales, por lo que no se trata únicamente de una cuestión de herencia genética.