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La justificación de las fórmulas para calcular el volumen de cubos, prismas y pirámides rectas en la vida real nos beneficia de varias maneras:

1. **Precisión en las mediciones**: Al comprender cómo se derivan estas fórmulas, podemos realizar mediciones más precisas y confiables en situaciones prácticas donde necesitamos conocer el volumen de objetos tridimensionales, como recipientes de almacenamiento, cajas, contenedores, etc.

2. **Optimización del espacio**: Conocer las fórmulas nos permite calcular el volumen de objetos y estructuras de manera más eficiente, lo que es útil en la planificación de espacios y el diseño de objetos para maximizar el uso del espacio disponible.

3. **Ahorro de recursos**: Al entender cómo se calcula el volumen de diferentes formas geométricas, podemos optimizar el uso de materiales en la construcción y fabricación de objetos, lo que puede conducir a un uso más eficiente de los recursos y ahorro de costos.

4. **Toma de decisiones informadas**: Conocer las fórmulas nos permite tomar decisiones informadas en situaciones cotidianas donde el volumen es un factor importante, como al empacar objetos en una mudanza, planificar la distribución de productos en un almacén o calcular la cantidad de líquido que cabe en un recipiente.

En resumen, la justificación de las fórmulas para calcular el volumen de cubos, prismas y pirámides rectas nos ayuda a realizar mediciones precisas, optimizar el uso del espacio y los recursos, y tomar decisiones informadas en diversas situaciones de la vida real.