Respuesta :

Respuesta:

Tomar medidas preventivas adaptadas a cada etapa de la vida, como la adolescencia y la adultez, es importante porque las necesidades de salud y bienestar varían según la edad. En la adolescencia, por ejemplo, es crucial establecer hábitos saludables tempranos y abordar temas como la salud mental, la prevención de adicciones y la educación sexual. En la adultez, es importante mantener un estilo de vida saludable, gestionar el estrés, realizar exámenes de salud regulares y prevenir enfermedades crónicas. Adaptar las medidas preventivas a cada etapa ayuda a promover una vida más saludable y a prevenir problemas a largo plazo.