Respuesta :

Respuesta:

En un prado colorido y lleno de flores, vivía una pequeña abeja llamada Maya. Maya era una abeja muy curiosa y trabajadora que siempre estaba en busca de aventuras. Un día, mientras volaba de flor en flor recolectando néctar, Maya se perdió en el bosque.

Desorientada y asustada, Maya decidió pedir ayuda a sus amigos del bosque. Se encontró con la mariquita Lila, el grillo Pedro y la mariposa Luna. Juntos, idearon un plan para encontrar el camino de regreso a casa de Maya.

Lila recordó haber visto un gran árbol al otro lado del prado, Pedro sabía cómo seguir el rastro de las flores que Maya había visitado, y Luna podía guiarlas con su brillante luz. Así, el pequeño grupo se embarcó en una emocionante aventura para ayudar a Maya a regresar a su colmena.

Después de superar obstáculos y trabajar en equipo, finalmente lograron encontrar el camino de regreso a casa de Maya. La pequeña abeja les agradeció con todo su corazón y prometió no volver a aventurarse tan lejos sin avisar a sus amigos.

Desde ese día, Maya aprendió la importancia de la amistad, la colaboración y la prudencia. Y juntos, siguieron disfrutando de nuevas aventuras en el prado colorido y lleno de flores.