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Estudio de una enfermedad y división de la población

Para el estudio de una enfermedad, es común dividir a la población en tres grupos: personas sanas, personas infectadas y personas recuperadas.

Esta división permite analizar y comprender mejor la propagación de la enfermedad, su impacto en la población y evaluar las medidas de control y prevención necesarias.

Es importante destacar que esta división puede variar dependiendo del contexto y los objetivos del estudio epidemiológico. Por ejemplo, en el caso de enfermedades transmisibles como el COVID-19, también se puede considerar a las personas expuestas como un grupo aparte.

La información obtenida a partir de esta división de la población puede ayudar a identificar factores de riesgo, evaluar la eficacia de intervenciones y diseñar estrategias de salud pública para prevenir y controlar la enfermedad.