En "La Bella Florida", un mago invoca una ciudad perfecta y encantada para impresionar al emperador, pero la ciudad se deteriora rápidamente debido a la curiosidad de los habitantes. La naturaleza toma el control, y los árboles crecen por todas partes, cubriendo la ciudad. El mago se convierte en guardián de esta ruina, intentando mantener viva la belleza de su creación. La historia es una meditación sobre la fugacidad de la belleza y el deseo humano de controlar la naturaleza.
