Coherencia: El texto presenta una idea principal clara y coherente, que es cómo obtienen las plantas los nutrientes y la energía necesarios para crecer. Se utiliza un lenguaje claro y conciso para explicar el proceso.
Cohesión: El texto utiliza conectores y palabras clave para mantener la cohesión entre las ideas presentadas. Por ejemplo, se utiliza “y” para conectar ideas relacionadas y “que” para introducir información adicional.
Coherencia temática: El texto mantiene una temática consistente al hablar sobre cómo obtienen las plantas los nutrientes y la energía necesarios para crecer. No hay cambios bruscos en el tema ni información irrelevante intercalada en el texto.
