Respuesta:
El entorno natural de una hacienda puede variar dependiendo de su ubicación geográfica, pero suele caracterizarse por paisajes rurales, como colinas, llanuras, ríos o arroyos cercanos, así como vegetación típica de la región, como árboles frutales, pastizales y cultivos agrícolas. Además, es común encontrar una diversidad de fauna, que puede incluir aves, mamíferos y reptiles propios del área. El entorno natural de una hacienda suele ser tranquilo y pintoresco, con una conexión cercana a la naturaleza.
