nahuel1nn
contestada

1) agrega los siguientes adjetivos en el texto de manera que un adjetivo modifique a un sustantivo: inmensa-altas-lúgugre-arremolinado-incesantes-fangosa-eterna-mortal.

"el Paraná corre allí en el fondo de una hoya,cuyas paredes, de cien metros, encajonan fúnebremente el río. desde las orillas bordadas de negros bloques de basalto, asciende el bosque, negro tambien. adelante, a los costados, detrás, la eterna muralla, en cuyo fondo el río se precipita en borbollones de agua"

2) subraya con diferentes colores 10 sustantivos, 10 adjetivos y 10 verbos de siguiente texto:

" la lluvia golpeaba los cristales en la habitación casi a oscuras. la pálida luz dorada del farol proyectaba sombras espectrales sobre la pared. el sol de principios del invierno ya se había escondido. la habitación estaba bastante fría.
en la cocina, una mujer bonita, almidonada y puicra, con su cabello castaño y sedoso lavaba las jarras de pultre para los invitados.
tarareaba una extraña melodía y sonreía de cuando en cuando.
la dueña de casa miraba la lluvia a través de los cristales de la sala. de pronto, las puertas laterales se abrieron. junto con una ráfaga de viento frío y húmedo entró un grupo de exaltados.
la mujer alzó la vista, frunció el ceño y, contrariada, se adelantó unos pocos pasos hacia la puerta principal del fondo de la casa"

3) continúa la historia anterior en no menos de una casilla. debes incluir adjetivos calificativos, numerales y gentilicios.​

Respuesta :

kuers

Respuesta:

1. "El Paraná corre allí en el fondo de una hoya, cuyas paredes inmensas, de cien metros, encajonan fúnebremente el río. Desde las altas orillas bordadas de negros bloques de basalto, asciende el bosque, negro también. Adelante, a los costados, detrás, la eterna muralla arremolinada, en cuyo fondo el río se precipita en borbollones de agua incesantes."

2. "La lluvia golpeaba los cristales en la habitación casi a oscuras. La pálida luz dorada del farol proyectaba sombras espectrales sobre la pared. El sol de principios del invierno ya se había escondido. La habitación estaba bastante fría.

En la cocina, una mujer bonita, almidonada y pulcra, con su cabello castaño y sedoso lavaba las jarras de pultre para los invitados.

Tarareaba una extraña melodía y sonreía de cuando en cuando.

La dueña de casa miraba la lluvia a través de los cristales de la sala. De pronto, las puertas laterales se abrieron. Junto con una ráfaga de viento frío y húmedo entró un grupo de exaltados.

La mujer alzó la vista, frunció el ceño y, contrariada, se adelantó unos pocos pasos hacia la puerta principal del fondo de la casa."

3. La mujer, de origen argentino, se acercó a la puerta principal, observando con atención a los visitantes. Eran cinco hombres y una mujer, todos vestidos con abrigos empapados por la lluvia. El líder del grupo, un joven alto de ojos penetrantes, habló con voz enérgica:

"Disculpe la interrupción, señora. Somos viajeros perdidos en esta noche oscura. ¿Podría brindarnos refugio hasta que amanezca?"

La mujer, aunque inicialmente recelosa, no pudo resistirse a la súplica de los forasteros. Les invitó a entrar y les ofreció una cálida bienvenida. Mientras los invitados se quitaban los abrigos, ella los observaba con curiosidad, tratando de discernir sus intenciones.

Poco a poco, la atmósfera de la casa se llenó con la energía vibrante de las historias compartidas entre la dueña de casa y sus huéspedes inesperados. La lluvia continuaba su danza fuera, mientras el calor humano y la camaradería llenaban el interior de la casa.

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