Los jabalíes, leones y jirafas están relacionados a través de la nutrición en el contexto de una cadena alimentaria. Los leones son depredadores carnívoros que se alimentan de presas como jabalíes u otros herbívoros. A su vez, los jabalíes son animales herbívoros que se alimentan de plantas, raíces e insectos. Por otro lado, las jirafas también son herbívoras y se alimentan principalmente de hojas, brotes y frutos de árboles.
Esta relación nutricional forma parte de una cadena trófica en la que los herbívoros como los jabalíes y las jirafas constituyen el eslabón primario al consumir vegetación, luego los leones, como depredadores carnívoros, se alimentan de estos herbívoros. Así, la nutrición establece una interdependencia entre estos animales dentro de su ecosistema, donde cada uno cumple un rol específico en la transferencia de energía a lo largo de la cadena alimentaria.
