Respuesta :

La política interior de Carlos I y Felipe II se caracterizó por su enfoque en la defensa de los principios religiosos, especialmente tras la influencia del Concilio de Trento. Ambos monarcas mostraron una intransigencia religiosa que los llevó a perseguir cualquier brote de herejía, prohibiendo la importación de libros, impidiendo estudios en el extranjero y reprimiendo la disidencia religiosa.

A pesar de estas similitudes en su política religiosa, existen diferencias significativas en sus reinados. Carlos I, también conocido como Carlos V, se vio envuelto en conflictos internos como la Guerra de las Comunidades y la Guerra de las Alpujarras, mientras que Felipe II enfrentó desafíos como la rebelión morisca y conflictos con Inglaterra.

Carlos I tuvo una visión imperial más marcada, centrada en mantener una monarquía cristiana y universal, lo que lo llevó a involucrarse en continuas guerras y a prestar más atención a su título de emperador que al de rey de España. Por otro lado, Felipe II se destacó por su carácter austero, autoritario y por su enfoque en mantener la unidad católica en Europa, invirtiendo esfuerzos y recursos en la defensa del catolicismo y en mantener una Europa unida y católica.

En resumen, mientras ambos monarcas compartieron una política interior marcada por la defensa de los principios religiosos, Carlos I se vio más envuelto en conflictos internos y externos debido a su visión imperial, mientras que Felipe II se centró en mantener la unidad católica y en enfrentar desafíos internos como la rebelión morisca y conflictos con Inglaterra.

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