Respuesta:
La distribución de la población puede estar relacionada con los niveles de pobreza de distintas maneras. Por ejemplo, en áreas densamente pobladas, como las ciudades, es común encontrar una mayor concentración de personas en situación de pobreza debido a la competencia por recursos limitados, costos de vida más altos y dificultades para acceder a oportunidades económicas. Por otro lado, en áreas rurales con baja densidad de población, la pobreza puede estar relacionada con el acceso limitado a servicios básicos y oportunidades de empleo.
Además, la distribución geográfica de la población también puede influir en la atención que reciben ciertas áreas por parte del gobierno y otras instituciones, lo que a su vez puede afectar los niveles de pobreza. Es un tema complejo que puede variar mucho dependiendo del contexto específico de cada región.