Un átomo está formado por tres partes: protones, neutrones y electrones. Estas partes son partículas subatómicas que tienen propiedades importantes:
Protones: Partículas con carga positiva que se encuentran en el núcleo del átomo
Neutrones: Partículas sin carga que se encuentran en el núcleo del átomo
Electrones: Partículas con carga negativa que se mueven alrededor del núcleo del átomo
El núcleo del átomo contiene el 99% de su masa y está formado por protones y neutrones, que se denominan nucleones. La carga positiva de los protones se iguala a la carga negativa de los electrones, de modo que la carga eléctrica total del átomo sea neutra.
Los electrones se organizan en capas sucesivas alrededor del núcleo, que están cada vez más alejadas de este. Las capas de electrones se conforman de una o más subcapas, y las subcapas se conforman de uno o más orbitales atómicos.
Los protones, neutrones y electrones son muy pequeños y la mayor parte del volumen de un átomo es espacio vacío. Las nubes de electrones de carga negativa de los átomos se repelen entre ellas si se aproximan demasiado, lo que da como resultado nuestra percepción de la solidez.
