Respuesta :
Explicación:
El crecimiento económico lento, parcial, desigual y regional en la Nueva España, así como su inserción en el mercado mundial, pueden atribuirse a diversos factores. A continuación, se enumeran algunos de los factores principales:
1. Estructura colonial: La Nueva España era una colonia española y estaba sujeta a las políticas económicas y comerciales impuestas por España. Estas políticas favorecían los intereses de la metrópoli y limitaban el desarrollo económico autónomo en la colonia.
2. Dependencia agrícola y minería: La economía de la Nueva España se basaba principalmente en la agricultura y la minería, especialmente la extracción de plata. Esta dependencia en sectores económicos específicos limitaba la diversificación y el desarrollo de otros sectores productivos.
3. Desigualdad en la distribución de la tierra: La propiedad de la tierra estaba altamente concentrada en manos de una pequeña élite, lo que impedía el acceso equitativo a los recursos y limitaba las oportunidades de desarrollo económico para la población en general.
4. Sistema de encomiendas: El sistema de encomiendas permitía a los españoles obtener tierras y mano de obra indígena, lo que exacerbaba la injusticia social y la explotación de la población indígena.
5. Monopolios comerciales y restricciones: España estableció una serie de monopolios comerciales y restricciones que limitaban la capacidad de la Nueva España para desarrollar su propio comercio y participar plenamente en el mercado mundial.
6. Desigualdades regionales: El crecimiento económico estaba fuertemente concentrado en algunas regiones, especialmente en el centro y el norte del país, mientras que otras regiones quedaban rezagadas en términos de desarrollo económico y acceso a recursos.
7. Influencia de las políticas mercantilistas: España aplicaba políticas mercantilistas que buscaban maximizar sus propios beneficios económicos y comerciales en el contexto del Imperio Español, lo que limitaba las oportunidades de desarrollo económico para la Nueva España.
Estos factores contribuyeron al crecimiento económico lento, parcial, desigual y regional en la Nueva España, así como a su inserción limitada en el mercado mundial. La economía de la colonia estaba subordinada a los intereses de la metrópoli, lo que limitaba su capacidad para desarrollar un crecimiento económico sostenible e inclusivo.