Respuesta :

Respuesta:

En la furia de mi ser, un vendaval de llamas,

arde en la noche oscura, mi corazón en brama.

Rayos de ira, relámpagos de furia,

en mi alma rugiente, la tormenta se abruma.

Mi voz un trueno retumba en el silencio,

mis palabras afiladas como dardos en el viento.

El fuego de mi cólera consume mi razón,

en esta danza de caos, pierdo toda noción.

Como un volcán en erupción, mis pensamientos estallan,

la lava de la ira, sin control se derraman.

Mis manos temblorosas, puños apretados,

en la furia desatada, mis sueños son quebrados.

En el abismo de mi ira, se pierde la cordura,

un huracán de odio devora mi ternura.

En este torbellino de furia y desesperación,

busco la calma perdida en mi corazón.

Pero en la oscura noche, aún brilla una estrella,

la luz de la esperanza en medio de la querella.

Que calme la tormenta, que apacigüe la ira,

y en el océano del alma, la paz vuelva a brillar.