EVOLUCIÓN DEL TRABAJO A LO LARGO DE LA HISTORIA
Por Teresa Eggers-Brass (2006)
Se pueden identificar diversas formas de trabajo en los distintos períodos históricos. En los albores
de la humanidad, el hombre realizaba tareas para garantizar su supervivencia sin recibir a cambio
otra compensación que la de lograr sus alimentos. En el Paleolítico, la depredación, que consistió
en la caza, la pesca y la recolección de frutos o vegetales, fue su forma de trabajo. Posteriormente,
en el Neolítico, los seres humanos pasaron a ser productores de sus propios alimentos, cultivando
la tierra. Asegurada su subsistencia y establecidos en ciudades, comenzó la división del trabajo
entre el manual y el intelectual. Quienes se dedicaron a pensar la forma de organización social y
política (religiosos, científicos, legisladores, jueces) se encargaron del trabajo intelectual. La vida
en las aldeas se fue tornando más compleja y dio lugar en algunas regiones a la revolución urbana.
Nació la oposición campo/ciudad y la labor campesina se consideró más ruda e inferior.
La primera forma de trabajo en relación de dependencia fue la esclavitud. Cuando los pueblos
aprendieron a generar excedentes de producción como para que no fuera necesario que todos
trabajaran fisicamente, las primeras civilizaciones optaron por no matar a los vencidos sino que
transformaron a los prisioneros de guerra en esclavos. Esto era beneficioso para los vencedores
porque además en las batallas morían muchos trabajadores, y esta escasez de mano de obra se
reemplazaba con la de los sometidos. Si bien la esclavitud existió durante miles de años (aún hoy
se encuentran casos de personas esclavizadas, sometidas ilegalmente en forma oculta a las institu-
ciones o al Estado) como modo de producción fue típico de la Antigüedad, con distintas variantes.
En algunos lugares el amo era el dueño de la persona
del esclavo, de su familia y de sus enseres.
En Roma se les permitía tener bienes e incluso existía
la lejana posibilidad de comprar su propia libertad.
Espartaco, esclavo y gladiador romano, luchó por
su libertad junto a muchos otros esclavos fugitivos,
venciendo en varias batallas a los ejércitos romanos,
hasta ser derrotado y muerto. Sus seguidores fueron
crucificados (pena de muerte romana) en el año 71 a.C.
En América, el imperio Incaico dominaba a otros indios
(que no aceptaban la sumisión al Inca) como yanaco-
nas, los que debían realizar los trabajos más pesados y
cuya servidumbre era hereditaria; los aztecas también
tenían esclavos originados en guerras, ociosidad o falta
de pago de deudas, pero no era una condición here-
ditaria. Con la conquista, se sometió a los indígenas
a trabajos forzados, por medio de la mita, el yanaco-
nazgo y la encomienda, y se trajo a cautivos africanos
quitándole atributos de personas, traficándolos como
esclavos para realizar los trabajos más duros en las
plantaciones tropicales. Los africanos islamizados, de
la nación Mandinga, fueron los que llevaron adelante
las más importantes rebeliones contra la explotación
del blanco, por ello los españoles asimilaron la pala-
bra "mandinga" a "diablo". Los amerindios también
"Aquí no somos ni cazadores ni recolectores.
Somos contables."
Por Sam Gross
Mosaico romano, en Dougga, Túnez. Los es-
clavos son los que portan las vasijas de vino