Respuesta:
El Imperio Bizantino, con su capital en Constantinopla, estaba estratégicamente situado y rodeado por tres importantes cuerpos de agua que eran cruciales para su comercio y defensa:
Mar de Mármara: Al sur de la ciudad, conectando con el Egeo a través de los Dardanelos
Mar Negro: Al norte, accesible a través del estrecho del Bósforo.
Cuerno de Oro: Un estuario natural del Bósforo que servía como puerto seguro y centro comercial de la ciudad
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