1. Raíces profundas: Algunas plantas tienen raíces muy profundas que les permiten acceder a agua y nutrientes que están a grandes profundidades.
2. Hojas especializadas: Algunas plantas tienen hojas que son más grandes o más pequeñas de lo normal, o que tienen una forma especializada para captar la luz solar o el agua.
3. Flores coloridas: Las flores coloridas son una adaptación que permite a las plantas atraer a los insectos y otros animales que las polinizan.
4. Frutos especializados: Algunas plantas tienen frutos que son muy dulces o muy amargos, lo que atrae a los animales que los consumen y dispersan sus semillas.
Estas adaptaciones son importantes para que las plantas sobrevivan y se reproduzcan en su entorno natural.