Las caracterizan este periodo son:
- Nacionalismo exacerbado: Un fuerte sentimiento nacionalista en varios países europeos, con una creciente competencia por la supremacía.
- Imperialismo: Las grandes potencias europeas competían por controlar territorios en África y Asia, lo que generaba tensiones.
- Armamentismo: Una carrera armamentista entre las grandes potencias, con un aumento significativo de la producción de armas.
- Alianzas: Se formaron alianzas militares entre las grandes potencias, creando un sistema de alianzas que podía desencadenar una guerra generalizada.
- Crisis diplomáticas: Se produjeron varias crisis diplomáticas, como la crisis de Marruecos (1905 y 1911) o la crisis de los Balcanes (1908-1913), que intensificaron las tensiones.
