Respuesta :

Respuesta:

buenas

Explicación:

La consagración a Dios es un acto de amor y obediencia que nos permite experimentar una vida plena y significativa en Cristo. Es un camino de crecimiento espiritual, transformación personal y servicio a Dios y al prójimo. A través de la consagración, nos convertimos en instrumentos de su gracia y misericordia, contribuyendo a la edificación de su reino en la tierra.