1. Creo que muchas veces pensamos que si no recibimos algo a cambio de manera inmediata, no estamos obligados a contribuir con el Estado porque vivimos en una sociedad que se enfoca en la inmediatez y en los beneficios personales. A menudo, solo pensamos en nuestros propios intereses y no en el bienestar común. Sin embargo, es importante recordar que el Estado proporciona muchos servicios y beneficios que no siempre son visibles o inmediatos, como la educación, la salud, la seguridad y la infraestructura. Si no contribuimos con el Estado, no podremos disfrutar de estos beneficios y nuestro país no podrá avanzar.
2. La cultura tributaria se puede definir como la actitud y el comportamiento que tienen las personas hacia el pago de impuestos y la contribución al Estado. Una cultura tributaria saludable es aquella en la que las personas entienden la importancia de contribuir al Estado y pagan sus impuestos de manera voluntaria y responsable. Esto se logra a través de la educación, la conciencia cívica y la transparencia en la gestión de los recursos públicos. Una cultura tributaria fuerte es fundamental para el desarrollo de un país y para garantizar que todos los ciudadanos tengan acceso a los servicios y beneficios que necesitan.
