Respuesta:
Las bombas atómicas son relativamente pequeñas en comparación con la cantidad de energía destructiva que pueden liberar. Esto se debe a la forma en que funcionan y a la gran cantidad de energía almacenada en el núcleo de los átomos.
Las bombas atómicas utilizan un proceso de fisión nuclear o, en algunos casos, una combinación de fisión y fusión nuclear. En un dispositivo de fisión, se libera una gran cantidad de energía al dividir núcleos de átomos pesados, como el uranio o el plutonio. La energía liberada en este proceso es inmensa en comparación con la masa de los núcleos de los átomos.
Debido a esta alta eficiencia energética, las bombas atómicas pueden ser diseñadas para ser relativamente pequeñas y compactas, lo que les permite ser transportadas en aviones o misiles. A pesar de su tamaño compacto, la energía liberada por la fisión nuclear puede tener efectos devastadores en una amplia área alrededor de la explosión.
En resumen, las bombas atómicas son pequeñas en tamaño, pero contienen una gran cantidad de energía concentrada debido a los procesos de fisión nuclear que utilizan.
