Respuesta :
El bautismo es un sacramento cristiano que simboliza el lavado del pecado original y el nacimiento a una nueva vida en Cristo. A través del bautismo, los creyentes se unen a la comunidad de fe y se convierten en discípulos de Jesús. Es un acto de fe y obediencia a los mandamientos de Jesús.
La confirmación, por otro lado, es otro sacramento que se administra después del bautismo. En la confirmación, los creyentes reciben el don del Espíritu Santo y son fortalecidos en su fe. A través de este sacramento, los discípulos son capacitados para vivir y dar testimonio de la vida de Jesús en el mundo.
En resumen, el bautismo y la confirmación son dos sacramentos importantes instituidos por Jesús para transmitir su vida a los discípulos de todos los tiempos. A través de estos sacramentos, los creyentes son iniciados en la fe, se unen a la comunidad de creyentes y son fortalecidos en su relación con Dios.